martes, 6 de junio de 2017

UN MOMENTO... CUANDO NO ENTENDEMOS LO QUE DIOS HACE

La imagen puede contener: texto

UN MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
CUANDO NO ENTENDEMOS LO QUE DIOS HACE

“Pero el Señor estaba con José en la cárcel y le mostró su fiel amor.” 
Génesis 39. 21

Romanos 12. 2, es un versículo de la Biblia que habla de 3 características que tiene la voluntad de DIOS: es buena, agradable y perfecta. Cuando leemos estas características en medio de una etapa de crisis o prueba definitivamente no podemos encontrarle lo bueno, agradable ni perfecto. Unos versículos más atrás ahí mismo en Romanos capítulo 11. 36 la Biblia hace la siguiente declaración: “Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas.” Si conectamos los dos pasajes podemos encontrar la respuesta a las preguntas recién mencionadas: todo lo que hace DIOS es bueno, agradable y perfecto ¡para Él! Nos gusta pensar que todo se trata de nosotros, como si DIOS estuviera a nuestro servicio buscando mantenernos cómodos y satisfechos en todo momento, pero estamos muy equivocados si eso esperamos de nuestra vida cristiana. 
La vida cristiana y todo lo que somos se trata de Él, de sus planes, sus estrategias, sus propósitos y sus intereses. Alguno podría pensar: ¿no suena un poco egoísta? Por definición a un egoísta no le importan los intereses de otros por lo cual no podríamos decir que el Señor es egoísta y la cruz es una evidencia clara de esto.
¿Qué hay detrás de la voluntad de DIOS? ¡Un corazón que nos ama, nos protege y nos acepta! Cuando la Biblia dice que todo lo ha hecho para Él, es porque no lo pudo haber hecho de una manera más perfecta. Y entonces, ¿qué hacemos con aquello que DIOS hace y no entendemos? todo dependerá de qué tanto confiamos en que DIOS nos ama y tiene cuidado de nosotros.
José, ante la situación injusta que estaba viviendo se puede haber preguntado, como nosotros muchas veces, ¿Qué hice para merecer esto? ¿qué he hecho malo?” Más de una vez cuando las cosas nos salen mal nos es muy difícil entender lo que DIOS hace, a veces pareciera que entre más nos esforzamos por agradar a DIOS y hacer las cosas bien, peor nos va. 
Pero, ¿realmente le estaba yendo peor a José? No lo enviaron a cualquier cárcel o a un calabozo profundo donde fuera torturado sino a la cárcel donde estaban los presos del rey, ¿no era en esta cárcel la última escala de José antes de ser gobernador de Egipto? 
Por supuesto que José no lo sabía, que fácil es leerlo nosotros que sabemos el final de la historia y entender que lo que DIOS hacía era bueno, agradable y perfecto. Pero ¡claro que no lo era para José! ¿No podríamos hacernos en medio de nuestras crisis y aflicciones estas mismas preguntas?, ¿realmente nos estará yendo peor o será que a la distancia entenderemos que esto era lo mejor que DIOS pudo haber permitido?
El Señor hizo que José fuera el preferido del encargado de la cárcel. DIOS no solamente prosperaba a José en todo lo que hacía sino también prosperaba todo a su alrededor. Potifar y el encargado de la cárcel percibieron a DIOS en la vida de José.
Muchos quisieran ver las señales y los milagros de DIOS para creer o confiar en Él pero ¿qué hay detrás de estos eventos?, ¿no es el corazón de Dios llamando nuestra atención para que nos acerquemos a Él? Y es aquí donde el corazón de José se hace sumamente admirable, hasta este momento de su vida no había visto ninguna señal ni prodigio, no tenía evidencia visible del poder de DIOS a su favor y sin embargo nada lo movía ni lo hacía titubear, no cedía a la tentación ni maldecía al cielo ni a su DIOS sino que por sobre todas las cosas seguía escogiendo una y otra vez agradarle a Él.
No siempre podremos sentir al Señor de nuestro lado, habrá ocasiones que oraremos y clamaremos al Cielo por ayuda y parecerá que nadie está escuchando, pasaremos por etapas de dolor donde seremos tentados a pensar que DIOS estaba en cualquier otro lugar menos con nosotros. Pero es allí donde la fe pura brota de un corazón que ha conocido el amor del Señor y comienza a recordar que DIOS no es un hombre para que mienta, si Él dijo que estaría con nosotros siempre ¡es porque lo está!, si la Biblia dice que tiene su mirada fija en nosotros ¡es imposible que no nos esté poniendo atención! si dice que cuando clamemos nos escuchará, ¡lo está haciendo! Ninguna de nuestras palabras está siendo ignorada, DIOS está allí siempre a nuestro lado. 
DIOS sabe lo que hace. ¿Quiere decir que no podemos derramar nuestro corazón y desahogarnos delante de Él? ¡Por supuesto que podemos! Pero si la respuesta final no la podemos entender no debemos guardar rencor ni reclamar por el resto de nuestra vida. Debemos tomar aquellos eventos y guardarlos en la caja que dice: “algún día lo entenderé”. ¿Habrá entendido José alguna vez lo que DIOS permitió en su vida?
Dios les bendiga abundantemente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario