lunes, 5 de junio de 2017

LEYENDO... 2 de Crónicas capítulo 8


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LECTURA DIARIA:
2 de Crónicas capítulo 8

Al cabo de veinte años, 7 años y medio en la edificación del templo, y 12 y medio para su palacio, Salomón reedifica algunas ciudades. Ahora su reino estaba seguro, estable y sobre todo bendecido por Dios.
Salomón había dado ciudades a Hiram pero este se las regreso. Estas ciudades quizás eran en pago por la ayuda brindada por parte de Hiram a Salomón en las construcciones. Salomón hizo uso de su ingenio y las hizo habitables para su pueblo.
Salomón dedico mucho tiempo a la construcción, la palabra edificar se usa varias veces en este capítulo.
A diferencia de David, Salomón no era un guerrero y no sacó a los habitantes del lugar sino que les hizo hacer los trabajos forzados. Salomón necesitaba fuerza laboral para todas sus construcciones.
Salomón trasladó a su esposa, la hija de faraón de la ciudad de David, el rey estaba consiente la situación espiritual de su esposa.
Su esposa con trasfondo pagano, no podía estar cerca de donde estaba el arca de Dios.
Salomón ofrecía 3 veces cada año holocausto y sacrificios de paz. El rey con la sabiduría dada por Dios logro poner todo control.
Salomón fue un gran hombre de negocios, pero eso lo llevo a descuidar su relación con Dios. Hizo y probo de todo y concluyo diciendo que todo era vanidad.

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