TIEMPO DE REFLEXIÓN
“Abram
creyó al Señor, y por eso el Señor lo aceptó como justo”. Génesis 15. 6.
Dios le hizo una promesa a
Abram, le prometió descendencia, sin ninguna duda el propósito de todo ser
humano, que de su carne nazca alguien que siga su legado, y Dios le confirmó a
Abram que esto sería así, “Y Abram creyó en el Señor, y él se lo reconoció
por justicia.”