jueves, 21 de diciembre de 2017

Leyendo... Salmo 91



LECTURA DIARIA:
Salmo 91

Este Salmo es uno de los más conocidos; es un salmo de confianza en un tiempo de peligro y de desafío contra los poderes malignos. 


Los dos primeros versículos enfatizan la comunión íntima con Dios.
El salmista se dirige a una persona, explicando la protección que Dios da. De su experiencia y fe personal puede ayudar a su amigo. Uno no puede comunicar a otros lo que no ha experimentado, pero debe comunicar su testimonio y su fe.
Los versículos 3-7 indican por qué hace falta refugio y protección; habla de trampas, plagas y peligro de muerte. Dios protege a los suyos todo el tiempo, contra toda tentación y ataque de satanás. No hay nada peor que una peste o plaga para la cual no se conozca cura. Para Dios hay cura y hay protección.
La Biblia enseña que Dios no hace acepción de personas; es decir, no es parcial hacia ninguna raza ni clase social; es misericordioso para con todos los que claman a él. Pero, sí, es parcial con los que se refugian y confían en él, los protege de manera especial.
La guardia de un ejército o de la policía puede fallar o ser engañada, pero ¿quién puede engañar a los ángeles que Dios envía para guardarnos?
En los versículos 14-16 hay una promesa de Dios mismo, recalcando su promesa de protección personal. De nuevo enfatiza la relación personal: en mí ha puesto su amor y ha conocido mi nombre. El que ama a Dios tiene esta promesa que incluye la liberación, un lugar de seguridad en alto, respuesta a sus oraciones, comunión con Dios, su presencia en tiempos de angustia, la gloria de Dios, larga vida y entendimiento de su salvación.

1 comentario:

  1. Amen que Dios me proteja y proteja a todo aquel que necesita de su amor y misericordia

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