UN MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
FUNDAMENTOS DE LA AUTORIDAD ESPIRITUAL
El primer fundamento:
DIOS ES LA MAXIMA AUTORIDAD PARA LA HUMANIDAD Y LA
IGLESIA.
DIOS es la primera autoridad y que en calidad de soberano
y omnisciente, Él quita y pone toda autoridad. Por su soberanía es que dentro
de su libertad, él puede hacer y deshacer lo que él cree que debe hacer basado
en su propósito eterno.
Por su soberanía es que el hombre después de haberle
recibido en su corazón, ya no puede discutir con DIOS por lo que él hace o deja
de hacer.
En vez de discutir, manera de mostrar desacato a la
autoridad, debe desechar sus propios razonamientos para aceptar la máxima y única
autoridad. No tratemos de argumentar contra DIOS, asumiendo que somos sus
consejeros y que sabemos más que Él. Él simplemente dice, hace y elige, no
pregunta ni espera nuestra opinión, solo exige obediencia (Salmo 24.1,
Colosenses 1.15-18, y Filipenses 2)
Es por ello que DIOS, tiene derecho sobre nosotros por
creación, redención, provisión y pertenencia. Él gobierna al mundo que Él mismo
creó y toda la autoridad se deriva de las leyes divinas (Romanos 13.1-2).
El hombre debe reconocer, aceptar, y obedecer a DIOS como
la Máxima Autoridad quiera o no, porque el resistirla es hacerse acreedor de
terribles consecuencias.
El segundo fundamento:
EL ESPIRITU SANTO ES LA MAXIMA AUTORIDAD DE LA IGLESIA.
Juan 14.16-17, 23-26, 16.13-15.
En el momento que una persona acepta a Cristo, es
bautizado por el Espíritu Santo (1 Corintios 12.13), es el acto de ser
incorporado al Cuerpo de Cristo que es la Iglesia. Acto por el cual se es
regenerado, se nace de nuevo, se convierte en hijo de DIOS (Juan 1.12, 3.3) y
en el que el Espíritu viene a morar en el corazón del nuevo creyente y lo sella
en señal de propiedad, pertenece a DIOS por toda la eternidad (Efesios 1.13-14)
A partir de ese momento, el Espíritu Santo, se convierte
en la Máxima Autoridad en asuntos de decisión, dirección y control. Significa
que ya no vivimos como a la aventura, ya no caminamos o hacemos las cosas por
casualidad, suerte, destino, horóscopos, adivinación, sueños, brujería,
visiones, loterías, rifas, sino por seguir la voluntad de DIOS, quien nos la
enseña es el Espíritu Santo a través de la Biblia.
San Juan 14.16-17 dice que Jesucristo envió a otro
Consolador y DIOS da testimonio de esta verdad, porque le da toda la autoridad.
Él estará con nosotros para siempre, todos los días, toda nuestra vida en la
tierra y ya lo conocemos porque él está viviendo en nuestro corazón. Luego en
los versículos 26-27 dicen que este mismo Consolador es enviado por el Padre en
nombre de Jesús para que nos enseñe todas las cosas y os haga recordar todo lo
dicho por Jesús. En los versículos 13-15 dice que él nos guiará a toda verdad.
Por consiguiente, la máxima autoridad que tiene el cristiano en asuntos de
decisión, dirección y control es el Espíritu Santo. Él nos ayuda, guía,
capacita para comprobar cuál es la buena, agradable y perfecta voluntad de
Dios.
Cuando tenemos que tomar una decisión, busquemos ayuda en
DIOS, por medio del Espíritu Santo. Él nos escuchará y nos ayudará.
El tercer fundamento:
LA BIBLIA ES LA MAXIMA AUTORIDAD.
La autoridad de DIOS y de Cristo está plasmada en cada
palabra escrita en la Biblia, porque ésta no contiene la Palabra de DIOS sino
que es la Palabra de DIOS. Ninguna persona posee ni el derecho ni la potestad
de aumentar, quitar, desfigurar ni modificar la Biblia, porque acarrea maldición
(Apocalipsis 22.19) Uno de los mandamientos de las Constituciones de los
diferentes países dicen: Todos deben obedecerla, los líderes deben obedecerla,
nadie puede estar sobre la constitución. La constitución del cristiano es la
Biblia esta debe ser obedecida por todos, y nadie debe actuar sobre de ella.
La Biblia es la autoridad final para todo asunto de fe y
práctica.
El problema del razonamiento versus la fe es que termina en rebelión y esta es
contagiosas. En la Biblia hay algunos ejemplos: Números 16.1-40.
El pecado de rebelión hacia la autoridad directa o
delegada por DIOS es más grave que cualquier otro pecado.
En resumen, la Biblia por lo que es y por lo que hace,
ella es la Autoridad Máxima y Final para todo cristiano (Salmo 119.19, 19:7-10;
2 Timoteo 3.15-17, 2 Pedro 1:21)
Y el cuarto fundamento:
SON LAS AUTORIDADES DELEGADAS POR DIOS LA MAXIMA
AUTORIDAD.
Romanos 13.1-5, 2 Pedro 2.13-17.
Se entiende que tales autoridades van a estar en
concordancia con los tres primeros fundamentos, y estas son las primeras en
cumplirlos.
La única decisión que satisface a DIOS es la obediencia.
Dios les bendiga abundantemente.
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