LEYENDO... Job capítulo 17

LECTURA DIARIA:
Job capítulo 17

Como en sus discursos anteriores, Job pasa aquí a considerar finalmente su muerte; porque es un suceso cierto en su futuro, y siente que se va acercando. Todo este capítulo gira alrededor del contraste entre “esperanza” y “muerte”. Pero también, entremezcladas con estas expresiones de desesperanza, aparecen agudas críticas para susamigos. 
Los tres amigos de Job tenían la reputación de ser sabios, pero Job no pudo encontrar sabiduría en ninguno de ellos. Obviamente estos hombres tenían una visión defectuosa de la sabiduría. Asumían que porque eran prósperos y exitosos, Dios debía estar complacido con la forma en que vivían y pensaban. Job, sin embargo, les dijo que estaban comenzando con una idea equivocada porque los éxitos y la prosperidad terrenales no son prueba de la fe en Dios. 
El hombre verdaderamente sabio sabe que la sabiduría proviene solo de Dios, no de los éxitos o fracasos humanos. El hombre verdaderamente sabio nunca abandona a Dios. La sabiduría de Dios prueba ser superior a la de Job y todos sus amigos. 
Job cae nuevamente en la desesperación, es una desesperación causada por el hecho de que cree que nunca será demostrada su inocencia. ¿Qué puede esperar para el futuro? Ha perdido a su familia y puede esperar sumarse a la familia de gusanos en él más allá. Si esa es su expectativa, no se puede llamar esperanza. 
La razón de su depresión no es que esté sufriendo una enfermedad fatal, sino que no ve señales de la reivindicación que demanda.
Job renunció a la esperanza de una restauración futura de su riqueza y de su familia, y se encerró en pensamientos de muerte y en el descanso prometido de la pena y el dolor. Las recompensas de las que hablaban los amigos de Job estaban todas relacionadas con la vida presente. 
No debemos evaluar la vida solo en términos del mundo presente, ya que Dios promete un futuro maravilloso y eterno para aquellos que son fieles a El.