LECTURA
DIARIA:
Isaías
capítulo 11
Isaías
pronuncia otra vez un mensaje de esperanza que se centra en el reinado del
heredero de David ordenado por Dios. Otra vez, es mejor ver la
consumación de la profecía como un acontecimiento de los últimos tiempos y su
cumplimiento inicial en tiempos de Ezequías.
Presupone
las dificultades por las que ha atravesado el trono de David desde la división
del reino. De esta corrompida raíz resurgirá una nueva vida en la persona de un
nuevo rey, simbólicamente llamado vara y vástago. Apocalipsis 5.5 llama a
Cristo «raíz de David».
Asiria
sería como un árbol cortado a la altura de su poder, para no levantarse jamás.
Judá (del linaje real de David) la cortarían como un árbol reducido al tronco.
Sin embargo, a partir de ese tronco surgiría un vástago: el Mesías. Sería más
grande que el árbol original y llevaría mucho más fruto. El Mesías es el
cumplimiento de la promesa de Dios, de que un descendiente de David gobernaría
para siempre.
El
Espíritu de Jehová da al rey su capacidad de gobernar, una verdad que se
manifiesta plenamente en el ministerio de Cristo. Isaías menciona al Espíritu
Santo más que ningún otro profeta.
Dios
juzgará con justicia y con equidad.
La
nación necesitaba con desesperación un avivamiento de justicia, equidad y
fidelidad. Necesitaban volverse del egoísmo y mostrar justicia al pobre y al
oprimido. La justicia que Dios valora, es más que refrenarse de pecar, es darse
activamente a otros y ofrecerles la ayuda que necesitan.
“Morará
el lobo con el cordero y el leopardo con el cabrito se acostará…y un niño los
pastoreará”. Este cuadro del versículo 6 de perfecta y bucólica paz simboliza a
una tierra . . . llena del conocimiento de Jehová . Tales condiciones implican
un mundo redimido y recreado por Dios, y comenzarán a manifestarse durante el
interludio del milenio
Aún
no había venido una época de oro, un tiempo de paz donde los niños podrían
jugar con animales que antes eran peligrosos. Todo esto no se cumplió con la
primera venida de Cristo. Por ejemplo, la naturaleza no ha vuelto a su balance
y armonía originales. Esta paz perfecta solo será posible cuando Cristo reine
sobre la tierra
El
reino del Mesías incluirá a los redimidos de todas las naciones que se reunirán
bajo su pendón.
Dios
volverá a facilitar el camino de regreso para su pueblo.
El
contenido de esta sección eleva a la altura más sublime el concepto de un rey
ideal que encarnaría la justicia absoluta y la paz victoriosa para felicidad de
todo el género humano. Todo esto aparece en marcado contraste con el rey de
Asiria, cuya gloria fue tirada por los suelos en la profecía anterior.
Este
rey mesiánico brotaría del tronco de Isaí, que es otra manera de aludir al rey
David. Las expresiones como “tronco” y “retoño” dan a entender que por causas
políticas internas o externas la dinastía de David sería interrumpida, pero
restaurada antes de que se desvanecieran sus raíces históricas: Y un vástago de
sus raíces dará fruto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario