jueves, 27 de diciembre de 2018

Leyendo... Zacarías capítulo 10



LECTURA DIARIA:
Zacarías capítulo 10

Zacarías recuerda a Judá que Dios tiene poder sobre la lluvia, aun en la estación tardía (la primavera), cuando uno asume que habrá suficiente lluvia.

Zacarías se refiere al juicio de Dios contra líderes pasados y presentes de Judá y el futuro papel del Mesías como buen pastor, incluyendo el efecto restaurador que ello tendrá. De nuevo, este pasaje se entiende mejor desde la perspectiva mesiánica y apocalíptica.
Los líderes, que deben ser pastores para el pueblo, son presentados como jefes, a los que Dios castigará.
La profecía de Zacarías, más de quinientos años antes de la primera venida de Cristo, lo llamó «la piedra angular», «la clavija», «arco» que gana la batalla y «apremiador» que es un hombre de acción; Este Mesías sería fuerte, estable, victorioso y confiable, todo esto al mismo tiempo. La solución a los problemas de Israel. Solo mediante el Mesías se cumplirán todas las promesas para el pueblo de Dios.
La «casa de Judá» se refiere al reino del sur y «la casa de José» al reino del norte. Efraín era la tribu más destacada en el reino del norte, llevaba el nombre del hijo de José. Algún día Dios unirá a su pueblo. El versículo 6 nos habla acerca de la reunificación de los judíos. Esta era una idea sorprendente: el pueblo del reino del norte se diluyó tanto entre otras culturas después del cautiverio, que la reunificación no sería posible por esfuerzo humano sino solo por Dios.
Aunque el pueblo del pacto sea esparcido entre las naciones, Dios promete que volverán. Esta profecía se cumplió parcialmente en los días de Zacarías con el retorno de los exiliados de Babilonia. Pero su consumación final ocurrirá en la Nueva Jerusalén, donde no solamente los judíos, sino todos los pueblos, adorarán a Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario