UN
MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
APOCALIPSIS
UN MENSAJE DE ADVERTENCIA Y DE ESPERANZA
El
libro del Apocalipsis, cuyo nombre significa revelación, es uno de los libros
más importantes del mundo. ¿Por qué?
¡Porque revela el futuro de la humanidad y
el futuro del planeta Tierra! Sin embargo, contiene símbolos y secretos que nos
desconciertan.
El
apóstol Juan estaba exiliado en la isla de Patmos, en la costa Sudoeste de
Turquía, la cual los romanos tenían como colonia penal. Juan ya había escrito
tres de las epístolas que formarían parte del Nuevo Testamento, cuando
alrededor del año 95 DC, DIOS lo inspiró a escribir el libro del Apocalipsis.
DIOS
le dijo a Juan que escribiera lo que veía, y pronunció una bendición sobre los
que estudiaran lo que Juan escribió: "Bienaventurado el que lee, y los que
oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas;
porque el tiempo está cerca" (Apocalipsis 1.3).
Juan
envió por escrito lo inspirado en la visión a siete iglesias ubicadas en una
ruta normal de correo en Asia Menor. Esas siete iglesias mantienen un
significado para nosotros en la actualidad.
Estas
eran: Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea (Apocalipsis 1.11).
Hoy en día es posible visitar sitios arqueológicos en esas ciudades al oeste de
Turquía.
La
condición espiritual de esas siete iglesias se ha reflejado en la Iglesia de
DIOS a lo largo de los últimos dos milenios.
Jesucristo,
nos dice que aprendamos lecciones de cada iglesia. Siete veces, una
vez por cada iglesia, nos dice: "El que tiene oído, oiga lo que el
Espíritu dice a las iglesias".
Jesús
amonesta a la Iglesia en Éfeso con estas palabras: "Tengo contra ti, que
has dejado tu primer amor" (Apocalipsis 2.4).
Su advertencia a los efesios es esta: "Recuerda, por tanto, de dónde has
caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras" (v. 5).
De
Esmirna se dice que fue la "iglesia perseguida". Jesús le dice
en Apocalipsis
2.9:
"Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico)…
Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida" (vs. 9-10).
Pérgamo, tercera escala en la ruta, se ha llamado "la iglesia que
transige". Toleraba doctrinas tendientes a la inmoralidad sexual. Jesús le
advirtió: "Arrepiéntete; pues si no, vendré a ti pronto, y pelearé contra
ellos con la espada de mi boca" (v. 16).
Tiatira
es "la iglesia corrupta". Jesús la amonestó: "Yo conozco tus
obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras postreras son
más que las primeras. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que
esa mujer Jezabel, que se dice profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a
fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos… He aquí, yo la arrojo en
cama, y en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se arrepienten
de las obras de ella" (vs. 19-22).
Sardis,
la quinta iglesia, se ha llamado "la iglesia muerta". Jesús advierte:
"Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto. Sé
vigilante, y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado
tus obras perfectas delante de Dios. Acuérdate, pues, de lo que has recibido y
oído; y guárdalo, y arrepiéntete" (Apocalipsis 3.1-3)
Filadelfia
era la "iglesia fiel". À sus miembros Jesucristo les promete:
"Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te
guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para
probar a los que moran sobre la Tierra. He aquí, yo vengo pronto; retén lo que
tienes, para que ninguno tome tu corona" (Apocalipsis 3.10-11).
Laodicea,
última iglesia en la ruta postal, es llamada "la iglesia tibia".
Jesús tiene esta advertencia para los laodicenses: "Yo conozco tus obras,
que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto
eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca" (Apocalipsis 3.15-16).
Jesucristo
desea que escuchemos la totalidad de los mensajes. En ellos revela los cambios
que debemos hacer en nuestra vida. Siete veces nos dice: "El que tiene
oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias"… a cada una de las
siete iglesias.
Los
siete mensajes de Jesucristo también revelan características espirituales y
actitudes de la Iglesia desde los tiempos de Cristo hasta el final de esta era.
Quizás estemos viviendo en una era como la de Laodicea, pero individualmente podemos
llevar una vida cristiana con la misma actitud de la Iglesia de Filadelfia,
amando a nuestros hermanos y entregándonos a ayudar para que el mensaje divino
de advertencia llegue a un mundo que pronto se verá en una crisis sin
precedentes, poco antes del regreso de Jesucristo.
Tengamos
presente el mensaje del Señor Jesucristo en nuestro corazón no solo para
escucharlo sino para cumplirlo.
¡Él
vuelve pronto!
Dios
les bendiga abundantemente.
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