UN MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
LA
FE REQUIERE CONSISTENCIA PARA QUE SEA FE
Todo
cristiano y aún no cristianos saben que Jesús tiene poder, sin embargo por la
manera de vivir demuestran lo contrario.
Por consiguiente, de nada sirve que
Jesús tenga poder, pues al no creer en él, no permitimos que lo demuestre. Los
discípulos saben que Jesús tiene poder y muchas veces lo vieron hacer milagros:
multiplicar el pan, dar vista a los ciegos, hacer andar al paralítico, ordenar
al mar y este lo obedece, resucitar a los muertos; sin embargo, su fe en Jesús
no fue consistente, al no estar seguros y dudar. La fe requiere consistencia
entre lo que se dice y lo que se hace, entre estas dos cosas está el creer.
Los
discípulos decían creer en Jesús, seguían a Jesús porque creían en él, sin
embargo, a Pedro Jesús le dijo que era un hombre de poca fe.
Ya
antes Jesús les había dicho a todos los discípulos que eran incrédulos.
En
otras palabras, aun cuando Pedro dice creer en Jesús, en el momento de
demostrarlo, su fe falló, no fue suficiente, por un momento fue consistente,
pero al dudar, esa fe dejó de ser fe.
Una
cosa es decir tener fe en DIOS, que se cree en DIOS y otra cosa es ponerla en
acción en el momento de prueba o cuando se nos exige o se requiere de la fe.
Este
es el gran reto para nosotros en este tiempo de tanta oposición.
Muchos
cristianos no están seguros de lo que creen y consienten con la nueva
tolerancia de aceptar lo que el mundo les impone, y otros somos incapaces de
defender lo que creemos, y hacer esto, no defender lo que creemos es lo mismo
que hizo Pedro, dudar, negar la fe, no tener la suficiente fe como para creer
que lo que DIOS ha dicho es la única verdad. Jesús le dijo a Pedro, ven, y
Pedro solo tenía que confiar y caminar, pero de pronto su fe dejó de ser fe.
Tener
fe en DIOS es obedecer y hacer todo lo que DIOS ha ordenado en la Biblia que
hagamos. Fe es más que un simple creer, es una decisión puesta en acción.
Por
favor, recordemos las cualidades de la fe vencedora:
La convicción profunda radicada en el corazón que nos capacita para enfrentar todo lo que se opone a DIOS. La confianza en DIOS que resulta de la buena relación con él.
La convicción profunda radicada en el corazón que nos capacita para enfrentar todo lo que se opone a DIOS. La confianza en DIOS que resulta de la buena relación con él.
(1
Juan 4.14-15).
El
fundamento de la vida cristiana (Hebreos 3.14) es confianza, y (Hebreos 1.3) la
sustancia que fortalece la vida. Las adversidades solo son oportunidades que
tenemos para demostrar lo mucho que confiamos en DIOS y decir al mundo que en
DIOS somos vencedores. La fe que supera las adversidades es la que obedece y
confía en DIOS en todo momento.
La
Biblia dice que a los que aman a DIOS, todas las cosas les ayudan a bien, esto
es a los que conforme a su propósito han sido llamados.
Quien
cree en DIOS de todo corazón, hará todo lo que él le ordene hacer. Si
obedecemos a Él en todo, y estamos dispuestos a hacer todo para honrarlo;
Romanos 8.28 será una realidad y las adversidades solo serán oportunidades para
que el poder de DIOS se demuestre más.
¿Deseamos
tener esa fe con el poder para superar toda clase de adversidad y continuar con
pleno gozo, satisfacción, y contentamiento por estar en las manos del DIOS
soberano?
La
experiencia de Pedro fue una oportunidad para demostrar lo mucho que confiaba y
creía en Jesús, pero allí aprendió que necesitaba creer más en DIOS. La fe
requiere consistencia para que sea fe. Quien dice creer en Jesús debe vivir
como Jesús vivió y hacer todo lo que él le manda hacer, eso es consistencia
entre el creer y el hacer, eso es fe demostrado en la obediencia. Fe es más que
palabras, fe son hechos, decisiones y acciones.
Dios
les bendiga abundantemente.
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