Leyendo... Ezequiel capítulo 5

LECTURA DIARIA:

Ezequiel capítulo 5

Rasurarse la cabeza era un signo de luto, humillación y arrepentimiento. Se le dijo a Ezequiel que rasurara su cabeza y su barba y que luego dividiera el pelo en tres partes, simbolizando lo que iba a suceder al pueblo en Jerusalén. Junto con las profecías verbales, Dios pidió a Ezequiel que utilizara imágenes visuales para llamar la atención del pueblo y grabar en su mente una impresión indeleble.

Una pequeña porción del pelo que Ezequiel colocó en su ropa simbolizaba el pequeño remanente de fieles que Dios preservaría. Pero incluso algunas personas de este remanente serían juzgadas y destruidas debido a que su fe no era genuina.

Dios había colocado a Israel en una posición privilegiada, por lo que su castigo sería más severo.

La maldad del pueblo era tan grande que ni siquiera podían guardar las leyes de las naciones paganas a su alrededor, ¡ni mencionar las de Dios!

Contaminar el templo, morada de Dios, al adorar ídolos y practicar el mal dentro de sus propias paredes era un pecado grave.

El triple juicio de pestilencia, hambre y espada aparece una y otra vez en Ezequiel

Dios iba a castigar a los israelitas por sus pecados flagrantes y quería que supieran que cumpliría lo que había dicho. El pueblo aprendió por las malas que Dios siempre cumple su Palabra.

Oprobio y escarnio y escarmiento y espanto,  se usan estas cuatro palabras para calificar a Israel.