martes, 13 de noviembre de 2018

Leyendo... Amós capítulo 6



LECTURA DIARIA:
Amós capítulo 6

A mediados del siglo VIII a.C. tuvo lugar un gran auge económico tanto en Israel como en Judá.
Los reposados en Sion y los confiados en el monte de Samaria son el mismo tipo de gente. Estaban complacidos debido a su exaltada posición económica y social. Se consideraban los principales entre las naciones a causa de su recién adquirido poder y riqueza. Pero su optimismo no era sabio.
Amós dirigió su ataque hacia aquellos que vivían en lujuria, tanto en Israel como en Judá.
Israel se vanagloria de su exaltada posición. Las grandes ciudades al este, norte y oeste habían sido destruidas debido a su soberbia. Lo que les sucedió a ellas le sucedería a Israel debido a que su pecado era igual de grande.
El pueblo había construido casas lujosas para hacer alarde de sus logros.
El versículo 6 describe la falta total de compasión de los ricos hacia los pobres con sus cargas tan pesadas. Amós no pudo ocultar su enojo al ver a los que tomaban vino en grandes copas mientras sus compatriotas morían de hambre frente a las puertas de sus palacios.
Esta clase de gente vivía su vida de una manera egoísta, sin preocuparse por nadie, excepto por ellos mismos.
El único futuro que Amós puede ver para una sociedad tan corrompida es que sus líderes irán a la cabeza del triste desfile de cautivos marchando a un lugar desconocido de cautiverio (versículo 7). Empleando lenguaje fuerte el profeta dice que el mismo Dios ha jurado la destrucción de un pueblo tan ciego al sufrimiento de sus prójimos. En lugar de defender a Samaria Dios va a entregar al enemigo la ciudad y a todos los que viven en ella. La clase dominante no va a disfrutar de los tesoros robados a los pobres y a los desvalidos.
En los tiempos de Amós no era fácil adquirir aun la ropa básica porque era muy costosa. Los pobres solamente tenían la ropa que llevaban puesta. De manera que cuando Amós menciona que se podría comprar a una persona por el precio de un par de zapatos hablaba de algo que podría ser una realidad.
La túnica era la ropa básica que usaban tanto el hombre como la mujer.
Los versículos 6:9-11 describen una epidemia universal que va a acompañar el sitio de la ciudad. Debido a la situación militar los habitantes no tendrán otro recurso que el de sacar los cadáveres y quemarlos en la plaza pública.
Las “visiones” de Amós que se encuentran en estos capítulos son en realidad sueños proféticos o pesadillas sobre el futuro.
Amós intercede por el pueblo, no en base a sus méritos, sino debido a su debilidad como nación pequeña sin muchos recursos. Amós sabía que Dios los había rescatado de la esclavitud y tenía mucha compasión por las viudas, los huérfanos y los pobres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario