UN MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
DIOS
QUIERE QUE SEAMOS AGRADECIDOS
Estamos
viviendo en una sociedad cada día más quejosa, pareciera que para muchos el
quejarse es casi tan vital como respirar.
Vivimos
quejándonos por lo que tenemos, por lo que no tenemos, por lo que nos falta,
por todo lo que hacen los demás, e incluso por lo que hacemos nosotros mismos.
Una
de las cosas que más frenan el avance en nuestro caminar diario, es
precisamente eso, la queja; perdemos un tiempo valioso en encontrar defecto y
cosas malas a todo y no nos deja avanzar.
Uno
de los motivos por el cual el pueblo de Israel estuvo estancado en el desierto
fue precisamente el quejarse.
La
Palabra de DIOS nos enseña a ser agradecidos, el apóstol Pablo dice a los
Tesalonicenses: "Estad siempre gozosos. Orar sin cesar. Dad gracias en
todo, porque esta es la voluntad de Dios” (1 Tesalonicenses 5.16-18).
La
gratitud no puede ir de la mano con la queja. Cuando nuestra mente está llena
de pensamientos negativos, surge la queja y se cierra la puerta para la
gratitud.
Es
el deseo de DIOS que seamos agradecidos. Hay muchas personas que no expresan
gratitud. Si alguien hace algo por ellos, no lo agradecen, creen que se merecen
no sólo eso, sino más y es una forma de expresar orgullo.
Para
tener una actitud de agradecimiento, necesitamos dejar que nuestros
pensamientos sean honestos, puros, amables, y dejar fuera el orgullo.
La
Biblia nos habla de una ocasión cuando Jesús sanó a diez hombres leprosos y
sólo uno regresó para dar las gracias a Jesús. (Lucas 17.11-19).
Mostrar
agradecimiento no sólo es bueno para los demás, sino también para nosotros
porque libera el gozo en nosotros.
Es
bueno meditar diariamente en todas las cosas por las que tenemos que estar
agradecidos.
Cuando
somos agradecidos, otros nos observan y son animados a hacerlo.
Cuando
no hay un corazón agradecido, las personas cierran las puertas para recibir
bendición y apoyo y pierden oportunidades tremendas de gozo y satisfacción.
Tengamos
siempre una actitud de agradecimiento hacia DIOS y hacia los demás, eso honra a
DIOS. Él lo pide. Demos gracias en todo. Él dice Yo honro a los que me honran.
El
ser agradecido, trae vida. Lo contrario, la queja, es un principio de muerte
que ataca los pensamientos y la conversación de la gente.
Trae
gozo y liberación. Ser agradecidos requiere un sacrificio porque muchas veces
nos encontramos en situaciones difíciles pero tener una actitud de
agradecimiento a DIOS por todo, nos libera y en vez de estar gruñones y
quejumbrosos sacrificando nuestro gozo a satanás, expresaremos agradecimiento a
DIOS.
Trae
oportunidades para explorar nuevos caminos. Las puertas se abren y la gente
aprecia un corazón agradecido.
Encontremos
la ocasión para ser agradecidos. Aún los pequeños detalles que otros hacen por
nosotros, deben ser motivo de gratitud.
Comencemos
desde hoy a practicar un actitud de agradecimiento primero a DIOS y luego a la
gente (Padres, maestros, pastores, hijos, familiares, y a todas aquellas
personas que hacen algo por nosotros y descubriremos que una nueva luz
iluminará nuestro sendero.
“Dad
gracias en todo porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo
Jesús”. (1 Tesalonicenses 5.18).
Dios
les bendiga abundantemente.
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