LECTURA DIARIA:
Isaías
capítulo 20
Este
capítulo describe otra experiencia de Isaías para así reforzar simbólicamente
el mensaje a Egipto y Etiopía sobre una inminente invasión asiria, y a Israel
de que no debía depositar su confianza en una alianza con Egipto.
Aparentemente, se trata del año 711 a.C.
Sargón
II fue rey de Asiria desde 722 al 705 a.C., y este suceso ocurrió en 711 a.C.
Isaías le recuerda gráficamente a Judá que no debe depender de alianzas
extranjeras para su protección.
El
mandamiento de Dios a Isaías fue de andar casi desnudo durante tres años, una
experiencia humillante. Dios utilizaba a Isaías para demostrar la humillación
que Egipto y Etiopía experimentarían a manos de los asirios. Pero el mensaje
fue realmente para Judá: No pongas tu confianza en gobiernos extranjeros o
experimentarás esta misma clase de vergüenza y humillación de tus captores.
Durante
esos tres años se le ordenó andar descalzo y despojado de sus ropas como un
cautivo de guerra, en toda circunstancia asociada con su ministerio profético.
Esto constituiría una profecía visual, escenificada, de la extrema humillación
de los egipcios por los asirios. Que Isaías se presentara en público desnudo no
significa que no llevara algo para cubrir sus partes íntimas. No es acerca de
él, sino de los cautivos egipcios, de quien se dice que serían conducidos “con
las nalgas descubiertas“.
El
cumplimiento de las órdenes divinas por parte de Isaías era una manifestación
humillante pero en extremo seria e insistente ante su pueblo. Si los dirigentes
de Judá no eran confrontados con tener que presenciar semejante escena, de otra
manera no le hubieran querido oír.
El
Señor ordenó a Isaías que mostrara anticipadamente a su pueblo cuál sería la
suerte trágica de Egipto, la nación en la cual Judá había depositado sus
esperanzas.
Por
otro lado, el capítulo 20 es una sección en prosa un tanto diferente al
material del Capítulo 19 y parece no tener conexión con las profecías
anteriores. Sin embargo, es posible considerar su contenido como el comienzo de
la secuencia que empieza con acontecimientos trágicos para Egipto, pero que
tienen un glorioso final como el que se describe en 19:25.
No hay comentarios:
Publicar un comentario