domingo, 15 de mayo de 2016

Leyendo... Génesis capítulo 14


LECTURA DIARIA
Génesis capítulo 14

En los tiempos de Abram, la mayoría de las ciudades tenían sus propios reyes.
Las rivalidades y las guerras eran comunes. Una ciudad conquistada pagaba tributo al rey victorioso.
No se conoce nada acerca de Quedorlaomer excepto lo que leemos en la Biblia. Aparentemente fue muy poderoso. Cinco ciudades, incluyendo Sodoma, le habían pagado tributo durante doce años. Las cinco ciudades formaron una alianza y se rebelaron. Quedorlaomer reaccionó rápidamente y los reconquistó. Cuando derrotó a Sodoma, capturó a Lot, a su familia y sus posesiones.
La codicia de Lot lo llevó a contornos pecaminosos. Su desmesurado deseo de adquirir posesiones y triunfos le costó su libertad y su contentamiento. Como cautivo del rey Quedorlaomer, estuvo expuesto a torturas, esclavitud y muerte. Cuando Abram supo que Lot estaba prisionero, inmediatamente corrió a salvar a su sobrino.
Abram, con tan sólo trescientos dieciocho hombres, persiguió al ejército de Quedorlaomer y lo atacó cerca de Damasco. Con la ayuda de Dios, Abram lo derrotó y rescató a Lot, a su familia y sus pertenencias.
El encuentro de Abram con el rey de Salem se revela como un encuentro con un arquetipo de Jesucristo en su papel de sacerdote.
Melquisedec significa: «Mi rey es justo o legítimo». Este saluda a Abram con un banquete real, pan y vino.
Como el único en desempeñar los oficios de rey y sacerdote, adora al Dios Altísimo, algo extraño en esa época y lugar. Antes de cualquier requerimiento legal, Abram respondió a su generosidad y bendiciones entregándole los diezmos de todo el botín obtenido en la reciente guerra.
Abram no quiso tomar botín del rey de Sodoma. Aun cuando tomarlo hubiera incrementado de forma significativa lo que iba a dar a Dios, decidió rechazarlo por razones más importantes. No quería que los de Sodoma dijeran: "Enriquecimos a Abram".
Prefería que miraran su vida y dijeran: "Dios ha enriquecido a Abram". Aceptar los regalos habría centrado la atención de todos en Abram o en el rey de Sodoma, y no en Dios, que fue el que en realidad ganó la victoria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario