lunes, 22 de mayo de 2017

UN MOMENTO... UNA SOLA MUERTE PARA DAR MUCHAS VIDAS

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UN MOMENTO PARA PENSAR EN DIOS
UNA SOLA MUERTE PARA DAR MUCHAS VIDAS 

"Porque también Cristo murió por los pecados una sola vez, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu; en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados, quienes en otro tiempo fueron desobedientes cuando la paciencia de Dios esperaba en los días de Noé, durante la construcción del arca, en la cual unos pocos, es decir, ocho personas, fueron salvadas por medio del agua. Y correspondiendo a esto, el bautismo ahora os salva (no quitando la suciedad de la carne, sino como una petición a Dios de una buena conciencia) mediante la resurrección de Jesucristo, quien está a la diestra de Dios, habiendo subido al cielo después de que le habían sido sometidos ángeles, autoridades y potestades." 
(1 de Pedro 3. 18 – 22)

El tema del sacrificio de una persona por el bien de otros es universal, al fin y al cabo es el tema central de gran parte del cine y la literatura, donde existe un héroe el cual pone su vida en peligro para que el mundo no sea destruido, desde superman hasta James Bond, desde Will Smith luchando contra extraterrestres en Día de la independencia hasta Buddy y Buzz luchando en Toy Story. 
Pero no solo la ficción ofrece el sacrificio, Nelson Mandela sacrificó su vida por vencer el Apartheid, Martyn Luther King entregó su vida por lograr el fin de la esclavitud y el racismo en Estados Unidos.
Es real que muchos hombres y muchas historias nos hablan del sacrificio por otros, del esfuerzo por lograr metas mayores a lo que supone una única persona, pero nadie ha logrado aun algo como lo que logró Cristo. "Porque también Cristo murió por los pecados una sola vez, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu; en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados, quienes en otro tiempo fueron desobedientes cuando la paciencia de Dios esperaba en los días de Noé, durante la construcción del arca, en la cual unos pocos, es decir, ocho personas, fueron salvadas por medio del agua. Y correspondiendo a esto, el bautismo ahora os salva (no quitando la suciedad de la carne, sino como una petición a Dios de una buena conciencia) mediante la resurrección de Jesucristo, quien está a la diestra de Dios, habiendo subido al cielo después de que le habían sido sometidos ángeles, autoridades y potestades."
El misterio de Cristo no está en su muerte, es su resurrección, si no hubiese salido de su sepulcro, hoy sería un buen hombre que dijo morir por los pecados, pero Jesús experimentó en su ser lo que era estar separado de DIOS, lo que sentirán aquellos que sean condenados por no haber creído en su nombre, la total separación del Padre. El éxito de la cruz se encuentra en que Cristo venció a la muerte, que logró bajar al abismo y volver.
Es por medio de este sacrificio que muchos hoy tenemos vida, es gracias a su paciencia que la vida eterna será una realidad, es por medio de la resurrección del Hijo de DIOS que nosotros también resucitaremos, seremos transformados, pasaremos de ser seres corruptibles a seres incorruptibles, de imperfectos a perfectos, de sucios a limpios, de pecadores a santos y todo esto por la sangre y la resurrección de Cristo. ¡Qué alegría ser hijo de DIOS!
Dios les bendiga abundantemente.

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