lunes, 13 de marzo de 2017

Leyendo... 1 de Reyes capítulo 3


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LECTURA DIARIA:
1 de Reyes capítulo 3

Salomón hizo parentesco con Faraón rey de Egipto al casarse con su hija. Esta no era la primera esposa de Salomón, él ya estaba casado con Naamah de los amonitas, antes de casarse con la hija de faraón.
La gran cantidad de mujeres que tuvo Salomón, fueron su ruina, porque inclinaron su corazón hacia sus dioses paganos.
Desafortunadamente Salomón amo a Dios pero también a sus esposas paganas.
En aquella época se permitía tener varios altares (Deuteronomio 16.21) siempre y cuando fueran dedicados a Dios. Cuando el templo fue construido esa práctica terminó.
Dios decidió manifestársele a Salomón por medio de un sueño. Dios le dijo a Salomón que pidiera lo que él quisiera, ya que Dios había prometido a David que estaría con él.
Salomón pidió sabiduría a Dios. Salomón pidió conforme a la voluntad de Dios porque este le dio lo que pidió y aún más.
Dos mujeres exponen su caso ante Salomón, como gobernante debía gobernar a todos. El mismo tomo el tiempo para escuchar a estas dos mujeres.
Pocos imaginaron lo que Salomón intentaría hacer cuando pidió la espada para partir al niño.
Nadie amaba a ese bebe como la verdadera madre, por eso ella pidió que mejor se le diese a la otra mujer.
La madre prefirió sacrificarse y no tener al bebe antes de que se le hiciese algún daño.
Las personas pronto supieron que esta forma de juzgar no era común y que Salomón era guiado por Dios.

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