sábado, 11 de marzo de 2017

Leyendo... 1 de Reyes capítulo 1


La imagen puede contener: 1 persona
LECTURA DIARIA:
1 de Reyes capítulo 1

En realidad David no era muy viejo de edad, pero su cuerpo si lo estaba
debido a la intensidad con la cual David vivió, guerras, aventuras, problemas familiares, etc.
Sus ciervos recomendaron una práctica común para ayudar al rey. El calor corporal es una práctica que aún en nuestros días se practica en el oriente.
Pidieron para eso una joven virgen para que atendiera al rey y lo abrigara. Buscaron cuidadosamente hasta dar con Abisag, la belleza era un extra, por ser para el rey, ya que David no tuvo relaciones con ella.
Adonías fue el cuarto hijo de David y era la elección lógica para sucederlo como rey. El primer hijo de David, Amnón, había sido asesinado por Absalón por haber violado a su hermana. Su segundo hijo, Daniel, hijo de Abigail sólo se menciona en la genealogía de 1 de Crónicas 3.1 y probablemente haya muerto en ese tiempo. El tercer hijo de David, Absalón, murió en una rebelión anterior. A pesar de que mucha gente esperaba que Adonías fuera el siguiente rey, Dios tenía otros planes.
Adonías decidió apoderarse del trono sin el conocimiento de David. El sabía que Salomón, y no él, era la elección primera de David para ser próximo rey (1.17).
El mismo se encargó de nombrarse rey y de darse lo necesario. Adonias tenía grandes personalidades de su lado como Joab, pero como Dios no estaba con él, estaba solo.
Joab traicionó a David porque lo veía viejo y además le guardaba rencor por querer destituirlo, además sabía que Salomón lo destituiría en cuando llegara al reino.
Pero hubo también grandes personas que se mantuvieron fieles a David y no siguieron a Adonias. Adonías hizo un gran banquete para celebrar su débil reinado, pero no invito a Natán, ni a Benaia, ni a Salomón, ni a muchos grandes, porque sabía que estaba haciendo mal.
Natán acudió a Betsabé, quien tenía una gran influencia con David. Sabía que Adonias los mataría lo más pronto para que no peligrara su reino.
Natán aconseja a Betsabé iniciar la charla con una pregunta ¿No has jurado a tu sierva, Salomón tu hijo reinará? La pregunta haría al rey reflexionar y no culpar a Betsabé.
Delante de David Betsabé no siguió el consejo de Natán de comenzar con una pregunta. Betsabé reveló a David su preocupación principal. Si Adonías no se tocó el corazón con su propio padre, no lo haría con Salomón y su madre.
Natán sabia como David consentía a sus hijos y que quizás no creería lo que le decían de Adonías. Inteligentemente Natán comienza la conversación con una pregunta que hará pensar al rey sobre la situación.
David llama a Betsabé quería que estuviera presente ella para reafirmar el juramento que le había hecho sobre Salomón. No seria difícil cumplir esa promesa porque estaba de acuerdo con la voluntad de Dios.
David llamó a tres prominentes hombres que permanecieron fieles a él y no se fueron con Adonías. Estos eran tres puestos muy importantes: sacerdote, profeta y un guerrero.
Benaia era un hombre con gran autoridad y valentía, estaba del lado de Salomón, y era un héroe que podía reemplazar a Joab.
A diferencia de Adonías, David hizo este acto en público. David estaba aceptando la voluntad de Dios y pasaba el trono a Salomón.
Hicieron subir á Salomón en la mula del rey. Las mulas eran animales valiosos y especiales para los reyes. A diferencia de Adonías, Salomón no tuvo que hacer nada para llegar a ser rey porque Dios estaba con él.
Aún no habían terminado la celebración de Adonías cuando la noticia llegó. Joab como hombre de guerra, sabía que el significado del sonido de la trompeta. 
Jonatán hijo del sacerdote Abiatar llevaba la noticia de que el trono pasaba a Salomón, por lo tanto Adonías era un usurpador.
Todos los invitados sabían que peligraban por estar con Adonías, él sabía que era culpable y buscó un lugar seguro para salvar su vida.
Los cuernos del altar eran usados para amarrar a los animales que se sacrificaban ahí. Si un criminal iba al tabernáculo y se agarraba de los cuernos del altar el sacerdote lo solía proteger para tener un juicio.
Salomón estaba dispuesto a hacerle un justo juicio, no le estaba perdonando la vida. Salomón envió a Adonías a su casa, indicándole que su lugar no era el palacio, le dió a Adonías un periodo de tiempo para probarlo y ver si estaba arrepentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario