UN MOMENTO CON DIOS
Nuestro proveedor
“Ha dado alimento a los que lo temen; para siempre se acordará de su pacto.” (Salmo 111. 5)
¿Necesitamos provisión en
algún área de nuestra vida, y no estamos realmente seguro/a de adónde ir a
buscarla? ¡Animémonos, porque en el Salmo 111! 5 Dios promete proveer a todos
los que “le temen” (temor reverente)! Mientras adoremos a Dios, tendremos Su
provisión.
Quizás nos han dicho que vamos
a perder nuestro trabajo. Tal vez estamos jubilados y vivemos de una pensión de
la Seguridad Social, y nos preguntamos qué nos pasará en el futuro. Ves que los
precios aumentan todo el tiempo, y escuchamos esa voz que nos susurra al
oído: “No vas a tener lo necesario para vivir”.
Quizás no nos alcance el
presupuesto, simplemente nuestro ingreso no alcanza para sostenerte, aunque estemos
haciendo todo lo mejor que podemos.
Sea cual fuera la razón por la
cual estemos preocupados por nuestra provisión, leamos este salmo en nuestra
Biblia. Meditémoslo e incluso memoricémoslo, porque contiene la clave para ver
satisfechas nuestras necesidades. De esa manera, cuando surja una necesidad en nuestra
vida, tendremos atesorada en nuestro corazón la Palabra de Dios, que nos
fortalecerá y nos ayudará a permanecer confiados en vez de atemorizados.
Creamos en la Palabra de Dios
cuando ÉL dice que dará alimento a todos los que le temen reverentemente y lo
adoran. Sea cual fuera nuestra situación, Dios proveerá para nosotros mientras
continuemos adorándolo y glorificándolo. La adoración realmente nos hará bien y
nos energizará; la preocupación hace que nuestros corazones se endurezcan y
pierdan la alegría.
No nos preocupemos; temamos y
adoremos a nuestro Señor y veremos cómo Dios provee para cada una de nuestras
necesidades.
Dios les bendiga
abundantemente.
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