miércoles, 16 de junio de 2021

Cada día... Nuestro refugio es Cristo.

 


CADA DÍA CON DIOS

Nuestro Refugio es Cristo

 

Los seres humanos por ser humanos tenemos una característica en particular y es que siempre nos equivocamos de manera constante, a estas equivocaciones bíblicamente le llamamos pecado.

1 Juan 1. 8 “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.” 

Pecar es errar al blanco es decir equivocarnos. 

La palabra de Dios es clara todos ofendemos de una forma o de otra, porque hacemos o porque no hacemos, porque hablamos o porque no hablamos. 

Santiago 3. 2 “Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo” 

La única forma que tenemos para entrar a ese refugio maravilloso que es Cristo, es a través del arrepentimiento y el querer cambiar. 1 Juan 1. 9 “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” 

Como protegernos en Cristo como nuestro refugio. 

1. Acercándonos a él. Josué 20. 4 a “Y el que se acogiere a alguna de aquellas ciudades, se presentará a la puerta de la ciudad,” Jesucristo no quiere obligarnos, es necesario que seamos nosotros quienes lo busquemos. 

2. Exponer o confesar nuestros errores o pecados. Josué 20. 4 b “y expondrá sus razones en oídos de los ancianos de aquella ciudad; y ellos le recibirán consigo dentro de la ciudad, y le darán lugar para que habite con ellos” Jesucristo es maravilloso y siempre está dispuesto a escucharnos. 

Que significa que Jesús sea nuestro refugio. 

1. Impide que otros nos puedan hacer daño. Josué 20. 5 “Si el vengador de la sangre le siguiere, no entregarán en su mano al homicida, por cuanto hirió a su prójimo por accidente, y no tuvo con él ninguna enemistad antes” Todos quienes le servimos a Cristo estamos expuestos a ser atacados, pero Jesucristo se encarga de nuestra protección. 

2. Nos hace descansar. Mateo 11. 28 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.” El descanso que nos ofrece Jesucristo no es inactividad, es entrenamiento, es prepararnos para salir a seguir Luchando 

3. Dios está con nosotros en los momentos difíciles. Isaías 43. 2 “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti” Dios no nos promete quitarnos los problemas, pero si nos promete estar con nosotros para ayudarnos a solucionarlos.  

4. Nos da fuerzas para lograr lo que queremos. Filipenses 4. 13 “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Cuando nuestras fuerzas se agotan, Jesucristo nos levanta para que podamos continuar.  

5. Nos entrena para la batalla. Salmos 144. 1 “Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra” Dios es un Dios protector, no sobreprotector.  

6. Sana y venda nuestras heridas. Salmos 147. 3 “El sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas” Las murmuraciones, chismes o mentiras además de las decepciones personales o de los demás siempre terminan hiriéndonos.  

7. Nos da consuelo para poder consolar a otros. 2 Corintios 1. 4 “el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.” Cuando nos refugiamos en Cristo, somos consolados y preparados para consolar a otros cuando salgamos del refugio. 

8. Intercede por nosotros cuando nos equivocamos. 1 Juan 2. 1 “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.” Todos nosotros somos pecadores, por eso Jesucristo siendo santo intercede por nosotros ante el padre celestial. 

Lo único que hace que no podamos disfrutar de la presencia de Dios, es la altives. Salmos 138. 6 “Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, Mas al altivo mira de lejos.” La altives nos impide arrepentirnos o reconocer nuestros errores. 

Todos en algún momento de nuestra vida hemos cometemos errores, nos cansamos y hasta no sabemos qué hacer, Jesucristo es nuestro refugio él nos hace descansar y cobrar nuevas fuerzas para lograr lo que queremos. 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario