TIEMPO
DE REFLEXIÓN
“Pero
Dios nuestro Salvador mostró su bondad y su amor por la
humanidad, y, sin que nosotros hubiéramos hecho nada bueno, por pura
misericordia nos salvó lavándonos y regenerándonos, y dándonos nueva vida por
el Espíritu Santo.
Pues por medio de Jesucristo nuestro Salvador nos dio
en abundancia el Espíritu Santo, para que, después de hacernos justos por
su bondad, tengamos la esperanza de recibir en herencia la vida eterna. Esto es
muy cierto, y quiero que insistas mucho en ello, para que los que creen en Dios
se ocupen en hacer el bien. Estas cosas son buenas y útiles para todos”.
Tito
3. 4 – 8.
Dios
es nuestro salvador, libertador, redentor, nuestra salvación solo pudo hacerse
manifiesta por medio del amor y la bondad de Dios que se hizo manifiesta en Cristo.
Su
salvación no proviene de nuestra propia justificación, ni de lo que hacemos,
provienen de Dios, para que el hombre no busque vanagloriarse, sino
desprenderse de su propia auto justificación y se entregue a Dios.
Nos
salvó, y mediante la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo, nos
restablece la vida espiritual que había sido muerta por el pecado.
Ahora
con la presencia del Espíritu en nuestras vidas puede ser restablecida, y la
renovación consiste en el quebrantamiento del hombre exterior, esa naturaleza
canal para que el espíritu sea evidente en la vida del creyente.
Para
que pudiésemos ser bautizados con el fuego del Espíritu Santo y este obrara en
regeneración y renovación de la naturaleza divina, Jesús fue entregado como
sacrificio, para que la paga del pecado fuese cumplida y el hombre pudiese
recibir esta preciosa salvación.
Justificados
por la obra redentora de Cristo, por su sacrificio, fue que pudimos llegar a
ser herederos de las riquezas espirituales de Dios y también pudimos recibir su
más hermoso regalo: la vida eterna.
Comprender
la obra redentora de Cristo, el amor y la gracia de la cual somos objeto nos
animan en nuestro crecimiento, nos animan a obrar con la misma bondad y amor
que recibimos, y el que un creyente lo comprenda es de mucho provecho para su
vida espiritual.
Dios
les bendiga abundantemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario