UN MOMENTO CON DIOS
Vivir o morir por Cristo
“Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.” (Filipenses 1. 21)
Cuando Pablo escribió acerca del Vivir o morir a la Iglesia de Filipos él
estaba preso. A pesar de estar encarcelado esta carta está escrita con mucha
alegría a una iglesia muy generosa en ofrendas y amor. Este primer capítulo de
su carta es más personal y Él va a compartir la paradoja que creo que muchos
creyentes enfrentan hoy en día.
Podemos entender lo que dice Pablo, si conforme pasa el tiempo y pasamos más
tiempo en este mundo, muchos esperamos con ansias el Cielo. Soñamos con ver a
Jesús cara a cara. Esperamos que no exista más llanto y una ¡visión perfecta de
Él! Sin dolores de cabeza solo coronas en la cabeza. Tenemos muchos deseos de
cantar con los ángeles y echar esas coronas a los pies de nuestro Salvador.
Pero también tenemos ganas de pasar tiempo con nuestra familia y hermanos aquí
en la tierra. Nos encanta tener buenos recuerdos y planificar para el
futuro.
Debemos desear las cosas del Cielo, mientras pasamos tiempo aquí en nuestra
morada temporal. Y cuanto más cerca caminas con el Señor, más esperamos y más
cerca estamos del Cielo. Es como vivir con nostalgia ya que como creyentes
estamos “obligados” a estar en este lugar imperfecto, deseando ese lugar
perfecto donde nuestro Padre vive, nuestra casa.
Vivimos para Cristo porque Él murió por nosotros. Qué apropiado es entonces que
Pablo haga esta declaración tan maravillosa. Cristo es la vida y cuando estamos
en Cristo tenemos toda la ganancia que necesitamos.
Dios les bendiga abundantemente.
Parece como si estuviéramos
atrapados entre dos mundos, éste en el que tenemos mucho trabajo por hacer por
Cristo y el otro, donde estaremos siempre estar con el Señor. Él dice en un
pasaje posterior “Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo
deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; pero quedar en
la carne es más necesario por causa de vosotros”. (Filipenses 1. 23 - 24)
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