viernes, 21 de octubre de 2016

Leyendo... Deuteronomio capítulo 6

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LECTURA DIARIA:
Deuteronomio capítulo 6

El contenido de este capítulo de Deuteronomio es similar a cuando Moisés una vez más resalta la importancia de la obediencia a las leyes de Dios. Esta repetición sirve para enfatizar la importancia de lo que Moisés se proponía enseñar a Israel.
Israel tenía que aprender las leyes y los decretos que Dios había dado para regular la vida comunitaria del pueblo. Al entrar en la tierra de Canaán Israel tendría que observar los decretos recibidos en el monte Sinaí y así aprender a temer a Dios. El temor de Dios produce obediencia y esa obediencia produce bienestar para la comunidad. Por su obediencia a las demandas del pacto, Israel prolongaría su vida en la tierra y el pueblo crecería en número.
La adoración de Dios como único Dios de Israel exigía la completa lealtad de la comunidad y demanda de cada israelita una entrega sin reserva a las demandas del pacto. Amar con todo el corazón, alma y fuerzas significaba una entrega total a Dios.
En el AT el corazón simboliza la voluntad, el razonamiento y la mente de cada persona. El amor no es una emoción del corazón sino la decisión de obedecer. Amar a Dios significa someterse a él, obedecer completamente sus leyes. Jesús dijo: “Si me amáis, guardaréis mis mandamientos”.
Moisés enfatizó la necesidad de cada israelita de aprender las leyes y mandatos de Dios y enseñar las palabras de Dios a sus hijos.
Cada nueva generación en Israel tenía que aprender a obedecer las palabras de Dios; cada nueva generación de israelitas debía aprender a amar a Dios. Día y noche, en casa o en el campo, cada padre tenía que repetir la palabra de Dios a sus hijos hasta que se tornara parte integral de la vida espiritual de ellos.
La orden de atar la palabra en la mano y en la frente era una manera simbólica de enfatizar el continuo recuerdo de la palabra de Dios.
Otra vez Moisés exhortó Israel a ser fiel a Dios después que entraran en la tierra de Canaán. Moisés temía que después de entrar en la tierra prometida y de acostumbrarse a la prosperidad de la tierra, Israel se olvidaría de Dios.
La tentación para el pueblo sería olvidarse de que toda la abundancia y bendición eran dadas a Israel por Dios.
La tentación de servir a otros dioses fue un problema que Israel confrontó durante la mayor parte de su historia.
Las señales y los grandes prodigios incluían no solamente la demostración de poder en Egipto sino también todas las señales hechas en el desierto durante los 40 años de peregrinación.
La redención de Israel sería completa cuando la promesa hecha a los patriarcas se cumpliera con la conquista de la tierra de Canaán.

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