UN MOMENTO CON DIOS
Vivamos en paz y seamos
felices.
“Si es posible, en cuanto de vosotros dependa, estad en paz con todos los hombres.” (Romanos 12. 18)
Isaac vivió entre los
filisteos, los cuales demostraron ser vecinos intratables. Él se había vuelto
tan poderoso y rico que ellos le temían y le pidieron que se fuera de su
territorio. Puesto que era mucho más poderoso que ellos, Isaac pudo haber
rehusado. Sin embargo, accedió y se mudó a un valle cercano adonde su padre
Abraham había cavado unos pozos años antes.
Los filisteos habían obstruido
los pozos después de la muerte de Abraham. Cada vez que Isaac abría uno de
nuevo, ellos decían que les pertenecía, a pesar de que no lo estaban usando.
Sencillamente eran
contenciosos. Pero Isaac prosiguió avanzando hasta que entró en área adonde los
filisteos no protestaron por su derecho al agua.
En nuestra vida, muchos hemos
encontrado gente así.
Personas que aparecen solo
para poner palos en la rueda y tratar de evitar que podamos avanzar en lo que
nos proponemos.
Es difícil que a uno le caigan
bien personas como esas, pero Jesús hasta llegó a decir que debemos amarlas,
orar por ellas y ser buenos con ellas.
Puede que no sea fácil, y esas
personas intratables podrían no cambiar. Sin embargo, según Romanos 12:18, aun
así, debemos hacer todo lo posible por vivir en paz con todo el mundo.
Isaac tenía una palabra de
Dios y siguió adelante con su cometido a pesar de que sus vecinos le hacían la
guerra. Como él, nosotros debemos seguir adelante con el plan que Dios nos ha
trazado en nuestra vida, sin contender con nadie, solo perseverando y avanzando
en fe.
Dios les bendiga
abundantemente.
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