UN MOMENTO CON DIOS
Un Padre compasivo.
“El Señor es, con los que lo honran, tan tierno como un PADRE con sus hijos” (Salmo 103. 13)
Una vez un padre compró una
bicicleta y llevó a su hijo a un parque para enseñarme cómo correr la
bicicleta. Al principio, hizo algunos metros, pero perdió el equilibrio y cayó.
El papá corrió detrás del niño, con la mano sostenía el asiento, y le
decía: «No te preocupes, yo te apoyo. Sigue pedaleando». Finalmente, lo
soltó, pero seguía alentándolo para que se sintiese seguro.
Mucho más que un Padre aquí en
la tierra, Dios, nuestro Padre Celestial, cuida de nosotros.
Dios sabe que muchas veces
somos como niños que están aprendiendo algo nuevo, haciendo nuestro mejor
esfuerzo, pero continuamos cayendo.
Pero nuestro Padre Compasivo
corre detrás de nosotros, alentándonos y diciendo: «Sigue, sigue; yo te
apoyo».
Jesús conocía mejor que nadie
la naturaleza de las cualidades de Su Padre. Sabía que Dios estaba siempre a Su
lado, desde el desierto donde fue tentado por satanás hasta el Getsemaní donde
oró para que se aliviase Su sufrimiento. Jesús nos muestra que nuestro Padre
nos ama y cuida más allá de lo que podamos imaginar.
Dios les bendiga
abundantemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario