miércoles, 11 de diciembre de 2024

Un momento... Jesucristo fue la promesa de Dios

 


UN MOMENTO CON DIOS

Jesucristo fue la promesa de Dios

 

“Levántate, Jerusalén, envuelta en resplandor, porque ha llegado tu luz
y la gloria del Señor brilla sobre ti. La oscuridad cubre la tierra, la noche envuelve a las naciones, pero el Señor brillará sobre ti y sobre ti aparecerá su gloria”. (Isaías 60. 1, 2)

 

Profeta tras profeta predecía la venida del Mesías. Muchas de las costumbres y festividades de Israel eran presagios de la esencia que habría de venir con su advenimiento. Pero al pasar un siglo tras otro, la vida parecía transcurrir como de costumbre, sin la promesa divina. ¿Acaso las palabras de Dios a su pueblo no eran más que promesas vacías? ¿Se habrían equivocado todos los profetas? ¿O el hombre estaba destinado a vivir en las cadenas de esclavitud y pecado? 

Luego, un día que comenzó como cualquier otro, la tan anhelada interrupción divina vino en forma de un bebé que cambiaría el destino de la humanidad. Para todos los que aún lo esperaban, Jesucristo vino en quietud y sin fanfarria. Pero el día de su nacimiento, el mundo cambió por completo. Nunca nada volvería a ser igual. 

Cada uno de nosotros tiene la capacidad de ser faros de esperanza y amor en un mundo que a menudo se siente oscuro y confuso. Al permitir que su gloria y presencia nos transformen, no solo nos beneficiamos, sino que también nos convertimos en instrumentos para iluminar el camino de otros. Así, cada pequeño acto de bondad y compasión puede ser un rayo de luz que los guíe hacia la salvación y el consuelo que solo Él puede ofrecer.

Dios les bendiga abundantemente.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario