Un momento... el amplio camino de Dios

 

UN MOMENTO CON DIOS

El amplio camino de Dios

 

“El Señor les abrirá un camino por el Mar Rojo, extenderá su brazo sobre el río Éufrates, hará soplar un viento terrible que lo dividirá en siete brazos, y podrán cruzarlos sin quitarse las sandalias. Cuando ese resto del pueblo del Señor vuelva de Asiria, encontrará un amplio camino, como Israel cuando salió de Egipto”. (Isaías 11. 15 – 16)

Isaías habla de un nuevo o un segundo Éxodo cuando Dios lleve de regreso a su pueblo esparcido a Israel, hoy sería a la iglesia, y el Mesías venga a gobernar el mundo. 
(1) Dios secó el Mar Rojo para que los israelitas pudieran cruzarlo camino a la tierra prometida (Éxodo 14). (2) Secó el río Jordán para que la nación entrara a la tierra (Josué 3). (3) Dios volverá a facilitar el camino de regreso para su pueblo.
Vemos que el pasaje dice, Dios alzará nuevamente su mano, está hablando de que va a hacer algo que ya había hecho en otro momento. Ya dos veces había secado el cauce, primero del Mar Rojo y luego del Río Jordán.
En este pasaje está preparando el camino, para un nuevo milagro, totalmente extraordinario que piensa realizar.
Cuando hoy miramos el panorama mundial en el cual nos encontramos, parece poco creíble que esto pueda realizarse, pero si miramos los acontecimientos anteriores, nuevamente se enciende la luz de esperanza.
La primera vez que Dios intervino, vemos que era un pueblo esclavo, en un país totalmente soberbio y dominador, era impensado que pudieran escapar para ser un pueblo libre.
La segunda vez, era entrar en una tierra de gigantes, los cuales eran a su vez experimentados guerreros, no solo entrar, sino que además, hacerles la guerra, vencerlos, y tomar sus territorios, totalmente loco, Dios lo hizo en ambos casos.
Cuando el evangelio sea públicamente predicado, los gentiles buscarán a Cristo Jesús como su Señor y Salvador, y hallarán descanso para su alma. Cuando llegue el tiempo de Dios para la liberación de su pueblo, los montes de oposición se convertirán en llanuras delante de Él. Dios pronto puede convertir los días sombríos en gloriosos.
Debemos perder el miedo y la vergüenza, hay que salir por las calles y recuperar el territorio para Jesucristo. El enemigo ha sembrado las calles de violencia, droga y destrucción, hasta cuándo vamos a esperar, ¿queremos acaso que el enemigo se meta dentro de nuestra casa o de nuestra iglesia para acorralarnos más? Tomemos toda la autoridad que nos ha dado el Señor y salgamos a conquistar este mundo para Jesucristo.
¿Hay acaso un ejército de circunstancias que nos persiguen? Dios puede destruirlas con las mismas armas con las que nos va a dar la victoria, ¿los problemas parecen gigantes indestructibles? Dios puede tirarlos de un hondazo y abrirnos camino en el medio de las aguas de este mundo.
Dios dice, ¿Hay algo imposible para mí? También dijo, “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”, también, “para el que cree, todo le es posible”.
No perdamos más tiempo, hay un mundo que espera, y Dios ya dijo que Él hará todo lo que sea necesario, aunque tenga que hacer un milagro tremendo y extraordinario.
Dios les bendiga abundantemente.