miércoles, 2 de septiembre de 2020

Tiempo... Salmo 23. 1

 


TIEMPO DE REFLEXIÓN

 

“El Señor es mi Pastor, nada me faltará”. Salmo 23. 1.

Este salmo tan hermoso se atribuye al rey David. David sabía muy bien lo que era la vida del pastor y su solicitud por las ovejas, pues era su actividad en los tiempos de su niñez.

Es interesante ver la confianza con la que David se refiere a Dios como "mi Pastor".

Una confianza que nace de una relación personal que David tenía con el Señor. Por eso se sentía parte de su rebaño y bajo su protección.

Esta relación personal, es la puerta de entrada para disfrutar de todas las bendiciones de las que habla David en este salmo.

Las ovejas son animales indefensos que necesitan ser constantemente guiadas y cuidadas por su pastor, dependen de él en todo. Tal vez sea por esto que el creyente es comparado con ellas.

Por otro lado, la figura de DIOS como Pastor encierra un montón de funciones que EL quiere hacer en nuestra vida.

 

-       El pastor conoce a sus ovejas: “Yo soy el buen pastor, y conozco mis ovejas, y las mías me conocen” (Juan 10:14).

-       El pastor se relaciona con sus ovejas. “…Las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por nombre,… y las ovejas le siguen, porque conocen su voz” (Juan 10:3,4).

-       El pastor ama sus ovejas. “…tuvo compasión de de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor” (Mateo 9:36).

-       El pastor las alimenta y cuida de ellas para que tengan buena calidad  de  vida. “yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia” (Juan 10:10).

-       El pastor protege y se sacrifica por ellas. “el buen pastor su vida da por las ovejas” (Juan 10:11). “pongo mi vida por las ovejas” (Juan 10:15).

 

El hombre tiene distintos tipos de necesidades, del cuerpo, pero también del alma y del espíritu; y solo DIOS puede suplir todas ellas.

El mundo actual vive una vida muy materialista y muchos piensan que el dinero lo hace todo, pero aún los más ricos han experimentado el fracaso al querer comprar la felicidad.

El único que puede satisfacer todas nuestras necesidades es DIOS, cuando permitimos a través de una relación personal con Cristo que el sea nuestro Pastor.

DIOS nos dice:”Yo te protegeré”, “Yo te proveeré”, “Yo te guiaré”, “Yo corregiré los problemas de tu vida por ti”. Si tú dejas que sea tu Pastor.

Cuando tu corazón esté a punto de desfallecer, recuerda esta palabra, Él es Nuestro Pastor. Aquellos que hemos recibido a Jesús como Nuestro Salvador, somos sus ovejas. Siempre que estemos bajo su cuidado, nada faltará, NADA. Ninguna cosa que sea necesaria hará falta.

Él es nuestro proveedor (2 de Corintios 9:10) y nuestro protector (Salmo 121:5). 

Dios les bendiga abundantemente.

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