miércoles, 13 de enero de 2021

Cada día... Bendecidos por Dios.

 


CADA DÍA CON DIOS

Bendecidos por Dios.

 

Muchas personas creen que ser bendecido es no tener problemas, por esta razón algunos hasta se atreven a juzgar mal a quienes están pasando por algún tipo de dificultad.

El Apóstol Pablo consideraba que era bendito con toda bendición.

Efesios 1. 3 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.”

El hecho de que el apóstol Pablo se considerara un bendecido no significaba que no tuviera que pasar por necesidades.

Para él ser bendito era poder vivir bien en cualquier situación que estuvieran viviendo.

Filipenses 4. 12-13 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

Génesis 26. 1.

Isaac era un hombre bendito, pero también tuvo que pasar por dificultades. “Después hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar.”

Como Recibir las bendiciones de Dios.

1. Renunciando a toda lógica humana.

Génesis 26.  2 “Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré.” Para Isaac lo más razonable para salir de la crisis económica que se vivió, en el lugar que estaba, era yendo a Egipto tierra próspera.

Nuestra lógica es la que nos impide disfrutar de las bendiciones de Jesucristo. Nuestra lógica es muy diferente a la lógica de Cristo

2. Obedeciendo así no entendamos lo que Cristo nos está pidiendo.

Génesis 26. 3 “Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; porque a tí y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré el juramento que hice a Abraham tu padre.” Como llegaría a ser próspero si estaría como arrimado o forastero.

3. Creyendo que los planes que Dios tiene para nosotros son mucho más grandes que los nuestros.

Génesis 26. 4 “Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo, y daré a tu descendencia todas estas tierras; y todas las naciones de la tierra serán benditas en tu simiente.” No le impongamos nuestros planes a Dios porque nos podemos quedar cortos comparados con lo que Dios nos quiere dar.

4. Nuestra Bendición también depende de las bendiciones de nuestros padres, y nuestra bendición también puede afectar a nuestros hijos.

Génesis 26.  5  “Por cuanto oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos y mis leyes.” La bendición que recibiría Isaac seria consecuencia de la obediencia de su padre  Abraham.

5. No permitiendo que nuestros miedos nos paralicen.

Génesis 26. 7 “Y los hombres de aquel lugar le preguntaron acerca de su mujer; y él respondió: Es mi hermana; porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer; pensando que tal vez los hombres del lugar lo matarían por causa de Rebeca, pues ella era de hermoso aspecto.” Una persona valiente no es la que no tiene miedo, una persona valiente es aquella que a pesar de sus miedos hace lo que tiene que hacer.

6. Actuar de acuerdo a las Promesas de Dios.

Génesis 26. 12 “Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo Jehová.”

De nada sirve tener muchos sueños o anhelos si no se actúa. El mundo de los perdedores y fracasados está lleno de gente soñadora pero inactiva.

7. Nunca desistir a pesar de los Tropiezos.

Génesis 26. 17 - 22  “Isaac se fue de allí, y acampó en el valle de Gerar, y habitó allí.  Y volvió a abrir Isaac los pozos de agua que habían abierto en los días de Abraham su padre, y que los filisteos habían cegado después de la muerte de Abraham; y los llamó por los nombres que su padre los había llamado…”

A Isaac le tapaban un pozo y el volvía abrir otro. No importa cuántos pozos te tapen siempre vuelve a empezar.

Nunca nos cansemos de seguir intentando, pronto nuestros enemigos se darán cuenta que Dios está con nosotros.

Génesis 26. 26 - 30 “Y Abimelec vino a él desde Gerar, y Ahuzat, amigo suyo, y Ficol, capitán de su ejército. Y les dijo Isaac: ¿Por qué venís a mí, pues que me habéis aborrecido, y me echasteis de entre vosotros? Y ellos respondieron: Hemos visto que Jehová está contigo; y dijimos: Haya ahora juramento entre nosotros, entre tú y nosotros, y haremos pacto contigo…”

Dios es un Dios maravilloso y está dispuesto a bendecirnos en gran manera. La pregunta es: estamos dispuestos a pagar el precio o el costo, de lo que es ser bendecido.

Dios les bendiga abundantemente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario