Cada día... Reconstruyendo nuestra vida.

 

CADA DÍA CON DIOS

Reconstruyendo nuestra Vida

 

Los problemas de la vida, las decepciones, los fracasos hacen que nuestra vida ya no sea igual o que ya no sea la mejor y cuando esto sucede es necesario que reconstruyamos nuestra vida, pero desde cero.

La lepra era una enfermedad de fácil contagio y que dañaba la vida de todo aquel que se enfermaba por esta razón era necesario acabarla de raíz, si la lepra continuaba era mejor demoler hasta la casa de quien la padecía. Levíticos 14. 45 “Derribará, por tanto, la tal casa, sus piedras, sus maderos y toda la mezcla de la casa; y sacarán todo fuera de la ciudad a lugar inmundo”

Muchas cosas se pueden convertir en nuestra vida en lepra mortal por esta razón es necesario demoler y volver a empezar de cero.

De manera sobrenatural Jesucristo puede hacer que nosotros seamos nuevos en todo, que empecemos de nuevo. 2 Corintios 5. 17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”

Construir nuestra vida sería difícil pero no tanto como reconstruirla. Para construir tan solo necesitamos de un terreno en el cual podamos hacerlo.

Para reconstruir es necesario derribar o demoler para des pues de esto construir, por lo tanto, para reconstruir se requiere más esfuerzo y mucho más tiempo.

Como Reconstruir nuestra Vida.

1. Olvidándonos del pasado o dándole un uso adecuado que nos permita reconstruir en lugar de estancarnos. Filipenses 3. 13 a “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás,”

Nuestro pasado puede ser nuestro mejor aliado para mejorar el presente o puede ser nuestro peor enemigo que nos detiene en nuestro avanzar.

2. Esforzándonos por avanzar hacia nuestra meta. Filipenses 3.13 b “y extendiéndome a lo que está delante.” La única forma de construir algo nuevo es no deteniéndonos y mucho menos no devolviéndonos.

La única forma de nunca detenernos es si sabemos exactamente qué es lo que queremos lograr en la vida, un buen propósito nos impulsa hacia adelante.

3. Perdonando a quienes nos han ofendido o perdonándonos nosotros Mismos. Colosenses 3. 13 “Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.”

Si nosotros perdonamos otros también lo harán. 2 Corintios 2. 10 “Pero a quien perdonéis algo, yo también lo perdono; porque en verdad, lo que yo he perdonado, si algo he perdonado, lo hice por vosotros en presencia de Cristo”

4. Tomando la decisión de ser feliz. 2 Corintios 2. 1 “Esto, pues, determiné para conmigo, no ir otra vez a vosotros con tristeza.” Cada quien es responsable de cómo quiere vivir en tristeza o en alegría.

Cada mañana es el comienzo de algo grandioso no importa el clima o las circunstancias. Salmo 118. 24 “Este es el día que hizo Jehová; Nos gozaremos y alegraremos en él.”

5. Creyendo que Dios nos ha dado el poder de destruir o construir. Jeremías 1. 10 “Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar.” Con nuestra forma de hablar podemos construir un nuevo futuro o un nuevo destino para nuestra vida.

Para cambiar nuestra forma de hablar negativa por una forma de hablar positiva es necesario tener un nuevo corazón, un corazón sano libre de traumas y temores. Ezequiel 36. 26 “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne.”

Todos nos equivocamos cada vez que tomamos decisiones o nos disponemos hacer algo nuevo y grande, por esta razón es necesario que siempre tomemos la decisión de comenzar de nuevo, las personas de éxito miran los problemas y las equivocaciones como oportunidades para corregir y avanzar.

Dios les bendiga abundantemente.