CADA
DÍA CON DIOS
La
Importancia de la Sabiduría
Cuando estamos pasando por momentos difíciles quisiéramos que alguien nos dijera pídeme lo que quieras, lógicamente en muchos esto no es más que un simple deseo difícil de cumplir.
Salomón tuvo
una experiencia maravillosa, Dios se le apareció y le dijo que le pidiera lo
que quiera. 1 Reyes 3. 5 “Y se le apareció Jehová a Salomón en Gabaón una noche
en sueños, y le dijo Dios: Pide lo que quieras que yo te dé.” la pregunta que
todos se hacen. ¿Qué pediría usted si Dios le hace ese mismo ofrecimiento?
Salomón podría haber pedido que le conceda ganar sus guerras, o que le diera
mucha más riqueza de la que tenía.
Salomón
sabía que el dinero se podría acabar y que el ganar una guerra no era garantía
que las demás guerras también las ganara, por eso el pidió sabiduría. 1
Reyes 3. 9 “Da, pues, a tu siervo corazón entendido para juzgar a tu pueblo, y
para discernir entre lo bueno y lo malo; porque ¿quién podrá gobernar este tu
pueblo tan grande?”
La
Importancia de la Sabiduría.
1. Nos
hace tomar buenas decisiones. Los seres humanos todos los días debemos
tomar decisiones, hacer o no hacer, ir o no ir. Etc.
Es
la sabiduría la que nos dice que cosas debemos hacer y qué cosas no
debemos hacer.
¿Qué
Debemos hacer para tener Sabiduría?
1.
Amar a Dios. 1 Reyes 3. 3 a “Mas Salomón amó a Jehová,” el amar a Jehová
representa creer profundamente en él.
Uno
no puede Amar a alguien que no conoce, para enamorarnos de Dios es necesario
conocerlo, y la única forma de conocerlo es atreves de su
Palabra.
La
recomendación de Dios es que lo amemos, él no quiere que tan solo lo busquemos
por necesidad o por costumbre. Deuteronomio 6. 5 “Y amarás a Jehová
tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus
fuerzas”
2.
Desacomodándonos por Dios. 21 Reyes 3. 4
a “E iba el rey a Gabaón, porque aquél era el lugar alto principal,” Salomón
podía haber hecho el altar en algún terreno de su palacio, pero prefirió
hacerlo en Gabaón en un Monte.
Nosotros
podemos lograr todo lo que nos propongamos siempre y cuando estemos dispuestos
a dejar el acomodamiento.
3.
Dando más que los demás. 1 Reyes 3. 4 b “y sacrificaba allí; mil
holocaustos sacrificaba Salomón sobre aquel altar” El dar más que los
demás no necesariamente tiene que ser de manera económico.
4.
Reconociendo las maravillas que Dios hace en nosotros y en los demás. 1 Reyes
3. 6 “Y Salomón dijo: Tú hiciste gran
misericordia a tu siervo David mi padre, porque él anduvo delante de ti en
verdad, en justicia, y con rectitud de corazón para contigo; y tú le has
reservado esta tu gran misericordia, en que le diste hijo que se sentase en su
trono, como sucede en este día” El ser agradecidos con Jesucristo nos motiva a
servirle de todo corazón.
5.
Reconociendo nuestras falencias o incapacidades. 1 Reyes 3. 7 “Ahora pues, Jehová Dios mío, tú me has
puesto a mí tu siervo por rey en lugar de David mi padre; y yo soy joven, y no
sé cómo entrar ni salir” Las personas que creen saberlo todo por lo general se
estancan y no avanzan.
Solo
las personas humildes son capaces de reconocer que necesitan ayuda y
que no todo lo saben, esto los convierte en sabios.
6.
Reconociendo que solo la Sabiduría nos hace hacer las cosas bien. 1 Reyes 3. 9
“Da, pues, a tu siervo corazón entendido para juzgar a tu pueblo, y para
discernir entre lo bueno y lo malo; porque ¿quién podrá gobernar este tu pueblo
tan grande?” La sabiduría es muy diferente a la inteligencia.
La
Inteligencia es la capacidad para hacer cosas, la sabiduría es la que
nos dice si eso que nos dice la inteligencia es bueno o es malo.
El
dinero no nos da sabiduría, pidamos sabiduría y todo lo que hagamos nos saldrá bien.
Dios
les bendiga abundantemente.
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