CADA
DÍA CON DIOS
Una
Buena Convivencia
Los seres humanos desde muy pequeños tenemos que aprender a relacionarnos con otras personas sea en el ámbito familiar, escolar o con los vecinos del barrio.
La
mayoría de los seres humanos desde muy pequeños mostramos cierto egoísmo que
hace que vivamos mal con los demás.
Muchas
personas se casan muy enamorados, pero a pesar de todo ese amor que se profesan
muchos terminan divorciándose, ¿Qué pasó si se amaban tanto?
Lo
que generalmente tienen fue mala convivencia, no se podían soportar,
entender o comprender.
Si
aprendiéramos a tener sana convivencia con los demás, los
hogares serían más apacibles, la sociedad no fuera tan
violenta.
Como
tener buena convivencia.
1.
Debemos entender que siempre tendremos malos entendidos con los Demás. Jueces
8. 1 “Pero los hombres de Efraín le dijeron: ¿Qué es esto que has hecho con
nosotros, no llamándonos cuando ibas a la guerra contra Madián? Y le
reconvinieron fuertemente”
Siempre
estamos expuestos a discutir con los demás porque hacemos o porque no
hacemos, porque decimos o porque no decimos. Etc.
2.
Haciendo sentir Importantes a los demás. Jueces 8. 2 “A los cuales él
respondió: ¿Qué he hecho yo ahora comparado con vosotros? ¿No es el rebusco de
Efraín mejor que la vendimia de Abiezer?” El no discutir de manera
insensata genera buena convivencia.
3.
Teniendo en cuenta que los halagos siempre son de provecho. Jueces 8. 3 “Dios
ha entregado en vuestras manos a Oreb y a Zeeb, príncipes de
Madián; ¿y qué he podido yo hacer comparado con vosotros? Entonces el enojo de
ellos contra él se aplacó, luego que él habló esta
palabra.” Recuerda que la respuesta amable aplaca la ira.
Proverbios 15. 1 “La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera
hace subir el furor.”
Como
se logra tener una buena convivencia.
1. Pensar
antes de hablar. Proverbios 15. 28 “El corazón del justo piensa para
responder; Mas la boca de los impíos derrama malas cosas.” Cuando
hablamos sin pensar por lo general terminamos ofendiendo a los que más
queremos.
2.
Ataca al problema no a la persona. Nadie está exento de equivocarse. En el
mundo se dice: “el que tiene boca se equivoca.” Santiago 3. 2 “Porque todos
ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón
perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo” Cuando atacamos al problema
buscamos soluciones, cuando atacamos a la persona la ofendemos.
3.
Usa un lenguaje claro y conciso. Cuando le damos vueltas a lo que decimos
corremos más riesgo de equivocarnos.
4.
Toma una postura de no confrontación. Nuestra actitud es la que muchas veces
ofende y daña a los demás. Cuando nuestra actitud es desafiante provocamos
reacciones ásperas de parte de los demás.
Antes
de hablar con un amigo, o con alguien que consideramos importante pensamos muy
bien lo que vamos a decir. Si tenemos una entrevista en alguna oficina con
alguien importante repasamos y repetimos muchas veces lo que vamos a decir de
esta forma debemos hacerlo cuando vamos hablar con nuestra familia.
Dios
les bendiga abundantemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario