Cada día... La reconciliación antes de la adoración.

 

CADA DÍA CON DIOS

La reconciliación antes de la adoración

 

Algunas personas dicen, “El tiempo lo cura todo”. ¡Pero NO, no lo hace! El tiempo no cura nada. La única manera de resolver los conflictos es enfrentarlos.

Cuando amas a alguien, ponte en paz con esa persona. Podemos llamar a esta acción, hablar de paz, sentándonos y hablando cara a cara.

Podemos decir: “Está bien. Cuando llegue el momento, lo enfrentaré”.

 DIOS  espera que nosotros tomemos la iniciativa. Él espera que seamos cada uno de nosotros, un pacificador. Que realicemos  el primer movimiento. Sin importar si fuimos el ofendido o el ofensor. DIOS quiere que seamos nosotros quien demos el primer paso.

 Mateo 5.23 - 24 dice “Por lo tanto, si presentas una ofrenda en el altar del templo y de pronto recuerdas que alguien tiene algo contra ti, deja la ofrenda allí en el altar. Anda y reconcíliate con esa persona. Luego ven y presenta tu ofrenda a Dios.”

 La reconciliación tiene prioridad sobre la adoración. Por lo tanto primero arreglemos nuestras relaciones, y recién entonces regresemos y podremos adorar a DIOS.

Estas son algunas sugerencias sobre cómo realizar un diálogo de paz:

 Elijamos el momento oportuno.  El mejor momento es cuando ambas partes estén en su mejor actitud, espera hasta que ambos estén descansados y preparados.   

Elijamos el sitio adecuado.  Que no sea en un público porque serán interrumpidos repetidamente. Ni cuando los niños estén alrededor. 

Oremos antes de la reunión. Siempre hablemos con DIOS antes de hablar con la persona en conflicto. 

Asistamos con una actitud positiva. Vayamos listos a reconciliarnos.  

 ¿Por qué tenemos que hacer esto? ¿Por qué tenemos que tomar la iniciativa?

En primer lugar, porque Jesús dice que lo hagamos. En segundo lugar, cuando estamos en medio de un conflicto con alguien,  nuestra adoración a DIOS no tiene ningún valor.

Y en tercer lugar, DIOS oirá nuestras oraciones cuando nos hayamos reconciliado con Él y con los demás.

Cualquier ruptura de relaciones puede afectar nuestra relación con DIOS. Si tenemos un problema con un amigo, debemos resolverlo lo antes posible. Somos hipócritas si manifestamos tener buenas relaciones con DIOS mientras no las tenemos con otra persona. Nuestras relaciones con los demás reflejan nuestra relación con DIOS.

“Si alguien dice: «Amo a Dios», pero odia a otro creyente, esa persona es mentirosa pues, si no amamos a quienes podemos ver, ¿cómo vamos a amar a Dios, a quien no podemos ver?” (1 de Juan 4.20)

La Biblia dice en 1 Pedro 3.7: “De la misma manera, ustedes maridos, tienen que honrar a sus esposas… Trátala como es debido, para que nada estorbe tus oraciones.” 

Este versículo es para todas las personas en cualquier tipo de relación. DIOS quiere que sanemos todas nuestras relaciones. Él quiere ofrecernos perdón. Y luego, que tengamos una relación correcta y productiva con DIOS.

Dios les bendiga abundantemente.